jueves, 27 de diciembre de 2012

LA BANDEJA

Desde que me casé, hace ya cuarenta años, en la víspera de Navidad tengo la tradición de hacer la bandeja, un recuerdo de cuando era niño, y mi padre tenia esta costumbre de amontonar en un plato una diversa variedad de dulces navideños.

Parece estar viendo como iba cortando a trozos cada uno de los diferentes turrones y “cascos”, poniéndolos con mimo conjuntamente con polvorones, alfajores, mazapanes, peladillas, etc. Hasta formar un conglomerado apetitoso y agradable a la vista.

Hay que decir que mientras organizaba la colocación de cada uno de los componentes, siempre había algún trozo que se perdía en su boca, y en la mia, por supuesto, relamiéndonos de placer.
Hace casi sesenta años, era un pequeño lujo el poder saborear estas deliciosas golosinas, y se aprovechaba Navidad para disfrutar de ellos.
Hay que reconocer, que la diferencia entre nosotros, ahora, y cuando éramos niños, son la variedad de cicatrices que nos ha ido dejando la vida, forjándonos en lo que somos… pero añoro esos momentos de mi niñez, por haberlos vivido con agrado.
Marco Valerio Marcial decía que “poder disfrutar de los recuerdos de la vida es vivir dos veces”. Y no puedo negar que cuando preparo la mesa de la cocina y coloco todos los ingredientes que van a componer la bandeja, disfruto con estas agradables evocaciones. Ya se sabe que el hábito convierte los placeres en necesidades cotidianas, y si nos fijamos, nuestra vida realmente no es más que un conjunto de hábitos.

Mi familia y amigos, conocen este rito mío navideño, y pasan por casa, sobre todo en mi cumpleaños, para saborear la variedad de sabrosos y azucarados confites.
No debe tener mala presentación, y no menos su degustación, cuando llego a rellenar antes del día de Reyes, hasta tres y cuatro veces la bandeja,.

La base de la bandeja siempre la hago con tortas escaldadas, rollos de pascua, mantecados. Y poco a poco voy añadiendo el resto de ingredientes repartiéndolos para que sea agradable a la vista: Turrones de yema tostada, duro de almendra, jijona, chocolate, trufa con guindas, cordiales caseros que hace mi mujer, polvorones de coco, chocolate y almendra, bombones, pan de Cádiz, peladillas, frutas confitadas (cascos decimos por esta zona), pasteles de gloria y de yema, mazapanes, etc.

Que aproveche, y que 2013 sea favorable para todos.

3 comentarios:

  1. amigo juan: DESPUES DE PASAR UNA NAVIDAD CON APENAS GANAS DE COMER , POR ESTAR UN POCO JODIDA DEL ESTO
    MAGO, AHORA TU VIENES CON ESAS HERMOSAS BANDEJAS
    MULTICOLORES, TAN BONITAS QUE PARECEN ESTAR DICIENDOME ¡¡¡PRUEBAMÉ !!!
    ESPERO QUE CUMPLAS MUCHOS MAS...
    BESOS PARA TI Y TU FAMILIA...
    CONCHITA,

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  2. Doy fe de la veracidad del asunto de la bandeja, ya que he degustado en múltiples ocasiones los dulces navideños que contienen.
    Sebas.

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  3. Me encanta,yo también tengo recuerdos de élaboration de la bandeja de navidad.
    Saludos desde Lyon Francia

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